DAR

Da sin esperar recibir algo a cambio, una frase que la he venido escuchando desde pequeño. Cuando pienso en la palabra dar, se me viene a la mente la siguiente imagen: estiro la mano que está sujetando un objeto y de repente aparece otra mano abierta acercándose poco a poco a mi mano cerrada, abro mi mano y el objeto que estaba sujetando pasa a la mano. Mi mano se queda vacia y abierta, y la otra sujetando lo que le dí.

Quizá esta imagen la compartamos muchos. Dar es desprenderte de algo. Y creo que aquí radica el problema y el conflicto mental a la hora de escuchar: da sin esperar recibir algo a cambio. Cuando das esperas recibir algo a cambio, así es como funciona la sociedad hoy en día. Y creo que sucede porque crees desprenderte de algo, por lo que quieres compensar ese vacío con otra cosa (que es la que esperas a cambio).

El dar creo que es compartir, es decir, ahora la imagen de "dar" que se me viene a la mente es la siguiente: mi mano sujeta algo, de repente se acerca una mano abierta. Extiendo mi mano, paso el objeto que tengo a la otra mano, la otra mano lo sujeta al mismo tiempo que yo, ahí estoy dando algo. El momento exacto en el que las dos manos se unen, es la acción de dar, de compartir. Cuando suelto el objeto, en mi mano queda la senación de haber compartido con alguien más algo, por lo que ya no espero recibir algo a cambio. ¿Díficil? sí. ¿Imposible? no. ¿Utopía? quién sabe.

Demos, compartamos. No solo las cosas materiales se pueden dar o compartir. ¿Qué tal si damos sonrisas? ¿Qué tal si compartimos amor? ¿Qué tal si recibimos felicidad?

Comentarios

Entradas populares